A cinco años de la hazaña

Transcurrido un lustro desde la consumación del máximo logro del Futbol Mexicano, la coronación de la Selección Mexicana Sub-17 dentro de la Copa del Mundo de la especialidad celebrada en Perú en el 2005, los llamados “Niños Héroes” del balompié azteca, ese puñado de jóvenes aplomados que se plantaron con propiedad ante los ojos del mundo para darle una lección de futbol, nada más y nada menos que al multicampeón Brasil para conquistar un reto que desde el principio estaba destinado para ellos, han dejado fluir la corriente del tiempo para encontrarse sin remedio con el proceso natural del ser humano, la evolución personal y por supuesto, futbolística. 

Caminos difíciles han andado unos, brechas abiertas y luminosas otros tantos, pero aquel domingo 2 de octubre apareció para dejar una marca imborrable en todos y cada uno de los protagonistas de la batalla y que desde entonces, soltaron el anonimato que cargaban bajo la tutela de Jesús Ramírez en el milenario territorio de la cultura inca y que al final de cuentas, conquistaron con todas las de la ley para brindarle la máxima satisfacción dentro del futbol a una nación que tiene en el balompié su deporte predilecto.

Cuatro de los Campeones del Mundo Sub-17 de México se forjaron con el sólido material rojiblanco en la reconocida cantera de Verde Valle, tres de ellos aún permanecen en el hogar. El arquero Sergio Arias, el mediocampista Patricio Araujo y el defensa lateral Omar Esparza, hacen una pausa dentro de su intensa actividad con el primer equipo del Guadalajara para ingresar en la máquina del tiempo y reconocer que hace cinco años fueron protagonistas de un suceso que les cambió la vida en muchos sentidos.

Donde en la actualidad comienzan a cosechar los frutos con los que poco a poco han demostrado que los “Niños Héroes” ya maduraron y se han convertido en hombres fuertes, con objetivos definidos y metas por alcanzar, quienes además aún no llegan a su techo futbolístico apenas a sus 22 años de edad, pues como fieles representantes de la generación dorada del Futbol Mexicano aún tienen mucho que brindar en su carrera futbolística.

Un Omar Esparza más maduro

Uno de los jugadores que fue pieza fundamental en este título, fue Omar Esparza, quien a cinco años de esta hazaña, platicó de la evolución que ha tenido desde entonces, de las diferencias entre el futbolista Campeón del Mundo, al Omar Esparza de la actualidad, y de todas las experiencias que ha tenido desde entonces, que le han permitido crecer en diferentes aspectos de su vida, sobre todo en lo futbolístico.

“Ya pasaron cinco años, lo que he notado es madurar en todos los sentidos, tanto en mi vida personal como en lo futbolístico y muchos procesos en mi vida, me ha tocado vivir muchas cosas desde que regresé (del Mundial Sub 17), Copa Libertadores, Liguilla, un Campeonato, esas cosas te van haciendo madurar, pensar diferente y ser cada vez más profesional en todos los aspectos, entonces eso en lo deportivo yo pienso que es lo que ha cambiado y sigue cambiando, seguimos mejorando y eso te lo va a dar esos años y la experiencia”, dijo con la seguridad de un jugador realizado.

El volante rojiblanco, aseguró que siente que se ha podido consolidar en Chivas, pero que aún tiene tareas pendientes por realizar, como la de mantener una continuidad en su desempeño en torneos consecutivos, pues está consciente que a pesar que tiene más de 100 partidos en Primera División, la mayoría de ellos como titular, aún tiene ese reto que alcanzar en su carrera deportiva.

“Por los partidos que he jugado, por los minutos, desgraciadamente me toca jugar todo un torneo y me ha tocado por cosas extras, una lesión o algo quedarme fuera por algún tiempo, pero es lo que he sentido en la consolidación, el jugar más de 100 partidos no es fácil y más del 50 por ciento de titular, también por mi posición me ha tocado hacer goles, entonces me siento contento más no satisfecho, quiero seguir trabajando, afortunadamente el torneo pasado jugué todos los minutos, para comenzar este torneo nada más pude iniciar el primer encuentro y después tuve esta lesión (fractura en el quinto metatarsiano del pie izquierdo), pero es aprendizaje, gracias a Dios todavía queda carrera por delante y esperemos seguirla, esa consolidación demostrarla dentro de la cancha”.

“Siento que todavía puedo dar más o a lo mejor el nivel que he mostrado, a lo mejor por torneos he mostrado mi nivel y por eso me ha tocado ir a la Selección mayor, eso es mi reto, demostrarlo y ser más continúo, terminar un torneo y al siguiente volverlo a iniciar de la misma forma, pero no se ha podido dar, entonces eso es lo que yo quiero hacer para poder demostrarlo y poder regresar a la Selección que vienen cosas y tornos importantes”, sentenció el volante tapatío.

Esparza Morales, reconoció que es un honor pertenecer al equipo que ha conseguido el máximo logro a nivel internacional en el Futbol Mexicano, y aseguró que es bonito que se recuerde este acontecimiento, pero que aspira a que cada año se le reconozca por los logros que obtenga con Chivas pues todavía tiene muchos objetivos por alcanzar en su carrera. Y añadió que el momento que más recuerda es el gol que anotó en la Final frente a Brasil, por todas las circunstancias que lo rodearon.

“Se siente una gran emoción, la verdad que muy contento, siempre se va a recordar, ya han pasado cinco años y lo seguimos recordando, pero también no quiero que nada más se recuerde a Omar nada más por eso, que haya quedado en ese título, también quiero conseguir cosas con Chivas, quiero que se me reconozca cada año, pero por diferentes cosas, se siente “padre” que se sigan acordando, que se siga recordando, pero que también se va a sentir mejor el que sea eso y más tanto en Selección como en Chivas”.

“Con mi gol, la verdad es que hay muchos momentos, pero siempre pienso en gol en la Final, el que me tocó anotar, por la forma, por el momento, por el partido, por el rival, por todo, la verdad que fue muy importante y lo sigo recordando con mucha alegría”, finalizó el orgulloso Campeón del Mundo Sub 17 en Perú 2005.

‘Fue algo maravilloso’.- Araujo.

Haber sido parte de la Selección Mexicana que conquistó el título del Mundial Sub-17 fue calificado como algo maravilloso por el mediocampista Patricio Araujo, quien fue el jugador que tuvo el honor de ser el capitán del equipo y recibir el trofeo de campeón tras vencer a Brasil en la Final.
A cinco años de distancia, del éxito obtenido en territorio inca, el Pato dijo sentirse maduro, gracias a la oportunidad que se le brindó en Chivas para evolucionar en su carrera futbolística, en la cual también ya tuvo la satisfacción de obtener un campeonato de Liga en el Apertura 2006.

“Ha sido muy grato, al año que llegamos de la Sub 17 me toca estar dentro del plantel en el campeonato del 2006, eso fue otro gran paso en mi carrera, otra cosa que quisiera repetir pronto, me marcó para muchas cosas, hoy en día me siento maduro dentro de la cancha, fuerte con más experiencia, eso me lo ha dado el estar jugando”, comentó acerca del proceso que ha llevado en estos cinco años.

Aunque durante la mayor parte del tiempo en su trayectoria en la Primera División ha sido con el Guadalajara, el Pato siente que aún necesita jugar todos los partidos en un par de torneos para sentirse un elemento con una carrera consolidada en el Máximo Circuito.

“Ese torneo que fuimos campeones me tocó estar en todos los partidos, yo quisiera estar así al menos dos torneos para decir que estoy consolidado, es la parte que me falta, que por equis razón no he tenido continuidad después de ese campeonato, ya sea llamados a la Selección o algo, este torneo ya no puedo completar todos los minutos, pero esperemos que el próximo esté ahí de planta”, indicó.

Asimismo, Araujo Vázquez manifestó que su nivel después de haber logrado el título en el Mundial Sub 17 ha sido muy parejo al entregarse al máximo en cada partido, aunque le gustaría anotar goles con más frecuencia para sentir que ha alcanzado su tope futbolístico.

“Siento que he estado muy regular, no hay mucha diferencia, lo que doy siempre es el 100, creo que lo que me falta es meter goles más seguido, es lo único que me hace falta para ser más funcional dentro de la cancha, siento que tengo la capacidad de meter buenos pases a los costados, se puede dar en cualquier momento que llegue a mi tope futbolístico”, expresó.

El Pato dijo que haber sido parte del mayor logro futbolístico en la historia del Futbol Mexicano simplemente fue maravilloso, con un toque especial al tener el orgullo de portar el gafete de capitán y ser el primero que levantó el trofeo luego del categórico triunfo por 3-0 sobre Brasil en la Final.

“Fue algo maravilloso haber estado en esa Selección, ser el capitán me dio muchísimas cosas, me abrió muchísimas puertas y sobre todo que he sabido manejar ese éxito, siento que el buen funcionamiento que hicimos nosotros, esa hambre, esas ganas de triunfar, todo ese tiempo estuvimos rompiéndonosla con trabajos de fuerza y demás nos dio ese resultado” finalizó Patricio Araujo.

Cinco años después… Sergio Arias

Capaz de observar en el espejo el reflejo de una persona que ha logrado madurar con base en mucho trabajo, pruebas duras y esfuerzo, el arquero Campeón del Mundo Sub-17 Sergio Javier Arias Delgado, revela que ha vivido cinco años de crecimiento personal y futbolístico, a partir de la conquista del campeonato Mundial en Perú en el 2005 y desde su trinchera, en la que actualmente lucha por un lugar en el primer equipo del Guadalajara, el guardameta sinaloense se destapa como un jugador equilibrado, alegre y sobre todo consciente de que el trabajo es la única llave para alcanzar sus objetivos dentro del terreno de juego.

“Durante estos cinco años, siento que he madurado mucho tanto como persona y como futbolista. Siento mucha alegría por todas las cosas que tengo, y eso me ayuda a seguir trabajando con mucho empeño para lograr las metas que tengo desde hace mucho tiempo que es debutar en la Primera División”, asegura con determinación el portero nacido en Los Mochis, Sinaloa.

En contraste con sus compañeros Patricio Araujo y Omar Esparza, Sergio Arias vivió en carne propia el proceso de estar alejado de la institución rojiblanca para acumular experiencia con los Dorados de Culiacán en la Liga de Ascenso, hecho que le ayudó a darle un justo valor a su entorno, aprendió a disfrutar de su profesión de futbolista y a darse cuenta de que nada de esto no está peleado con el trabajo y por el contrario van de la mano.

“Al estar fuera de lo que es Chivas te ayuda a darte cuenta de muchas cosas, de lo que representa esta institución, lo valoras más. Todo esto también te ayuda a madurar como futbolista y como persona, definitivamente aquí en Chivas lo tenemos todo y muchos jugadores debemos darnos cuenta de eso”, dice Sergio Arias al mismo tiempo que empalma sus guantes blancos tras una ardua sesión de entrenamiento.

Arquero de Finales
A pesar de que aún el guardameta rojiblanco no ha podido consolidar su sueño de debutar en el Máximo Circuito, su carrera se ha distinguido por sus actuaciones en Finales, desde el Campeonato Mundial Sub-17, con los Dorados de Sinaloa en la Primera A, la obtención de la medalla de Bronce en los Panamericanos del 2007, y la Final de la Segunda División Premier en su regreso al Club Deportivo Guadalajara el semestre anterior frente a la Universidad del Futbol de Pachuca, Arias ha saboreado desde las mieles del triunfo hasta la tristeza de las derrotas, pero cada Final le ha dejado su dosis de crecimiento.

“Sí, esas son algunas satisfacciones que he logrado en mi trabajo, aunque no me ha tocado debutar en la Primera División siento que he hecho bien las cosas en este tiempo, porque me ha tocado jugar Finales, unas me ha tocado ganarlas, otras perderlas pero todo ha sido muy buena experiencia para mi y una motivación para seguir adelante con el trabajo que te va diciendo cuando estás haciendo bien las cosas”, agregó el portero Campeón del Mundo Sub-17, cinco años después del sonado logro del Futbol Mexicano.

Sergio Arias sigue adelante en su largo y sinuoso camino, mismo que le deja asentado que para nada ha alcanzado en lo absoluto su tope futbolístico, pues le falta la base angular de la carrera que sostiene a todo jugador: el debut en la Primera División y en este 2010 está más cerca que nunca de su ansiado objetivo al luchar palmo a palmo por un lugar en el primer equipo del Rebaño, al lado de arqueros como el mundialista Luis Ernesto Michel, y el trabajador y paciente Hugo Hernández.

“Claro que no he alcanzado mi techo futbolístico, hacerlo sería debutar en Primera División, ser un ídolo, llegar a la Selección Nacional, jugar Mundiales, llegar a Europa, y sinceramente todo eso para mi está lejos, debo tener un primer paso que es debutar en Primera División”, expresó seguro de sí mismo Sergio Javier Arias.

Como integrante de la única selección mexicana de futbol que ha conquistado un campeonato del mundo, Sergio Arias se niega a admitir que es un hecho que lo marcará incluso después de su retiro como futbolista profesional, pues el guardameta rojiblanco prefiere vivir el día a día en el que ha trabajado y aprendido de su crecimiento personal y futbolístico.

“Nunca me he puesto a pensar en eso, prefiero vivir el día a día, seguir trabajando, ahora aprendiendo al lado de dos muy buenos porteros como Luis Michel y Hugo Hernández porque hay un primer paso que tengo que dar que es debutar en Primera División, por que si no apareces no puedes lograr todo lo demás. Lo del campeonato del mundo es inolvidable, pero la carrera en el futbol sigue y en lo personal me queda mucho por vivir”, concluyó Sergio Arias.