Con la convicción de estar en el óptimo nivel en todos los sentidos, la mañana de este miércoles Chivas realizó una exigente práctica en el Estadio Omnilife para apuntalar aspectos físicos y futbolísticos, con miras a su debut en la Copa MX, el próximo martes 23 de julio contra los Rayos del Necaxa en la ciudad de Aguascalientes.
En punto de las 10 de la mañana, el equipo rojiblanco dio inicio a la actividad. Los jugadores de campo trotaron alrededor del terreno de juego para hacer la entrada en calor, mientras que los guardametas realizaron su acondicionamiento con el Entrenador de Porteros Luis Valls.
Para los jugadores de campo, la intensidad aumentó con un trabajo aeróbico establecido por el Preparador Físico Daniel Ipata, con la intención de mantener el buen fondo físico que adquirieron durante la etapa de pretemporada previa al Torneo de Apertura 2013.
Enseguida, y como ejercicio de transferencia hacia las labores futbolísticas de la sesión de entrenamiento, los integrantes del conjunto tapatío, a excepción de los guardametas, quienes trabajaron en el aspecto técnico, realizaron una dinámica de torito en tres grupos para comenzar la actividad con pelota de por medio.
El Director Técnico Benjamín Galindo decidió dividir al equipo en dos grupos para realizar trabajo específico con el objetivo de precisar aspectos técnicos y tácticos para alcanzar el mejor nivel con miras al encuentro del próximo martes contra los Rayos del Necaxa, en Aguascalientes.
Bajo el mando del timonel del equipo, los delanteros practicaron diversos remates a la portería en busca de tener la mayor efectividad en las opciones de gol que se presenten en cada encuentro, mientras que los defensas y mediocampistas ensayaron los recorridos para tener la adecuada aplicación para detener los avances del rival.
Tras concluir estas actividades, el Rebaño llevó a cabo un ejercicio de futbol en espacio reducido en el que no se respetaron posiciones con el fin de concluir la práctica con una actividad recreativa y mantener el buen ambiente entre los integrantes del conjunto rojiblanco, pero sin perder la exigencia, ya que los jugadores del equipo perdedor tuvieron que realizar abdominales y lagartijas.
Al final de la práctica, los integrantes del Rebaño convivieron con los aficionados que se dieron cita en el Estadio Omnilife en busca de un autógrafo o una fotografía de los elementos de su equipo preferido, pues además de los seguidores locales también había fanáticos de otros lugares de la república que visitan Guadalajara en esta época vacacional.