Pasto resbaladizo y chamarras impermeables que cubren la totalidad del torso, un balón que se niega a ser dominado por los pies que le exigen control durante la práctica a espacios reducidos ante la negativa de la esférica porque el agua así se lo demanda.
Así, en medio de los clásicos inconvenientes que suele poner la lluvia cuando se practica futbol, así terminó la tarde de este martes el entrenamiento vespertino de las Chivas.
Pues aunque se comenzó la práctica con el cielo despejado y sin incoveniente climático alguno, transcurrido el entrenamiento apareció una ligera lluvia que no impidió el trabajo en la cancha, pero que con el paso de los minutos y la inminente acumulación de agua hizo menos llevadera la parte final de la sesión.
“Chepo” de la Torre trabajó con su equipo en el aspecto técnico táctico en espacios reducidos y fue la parte escencial de la segunda sesión de este martes.
Este miercoles Guadalajara entrenará en punto de las 10:00 horas en las instalaciones del Deportivo Autlán, que se encuentran a un costado de los terrenos donde ya se trabaja en la construcción del nuevo Estadio Chivas.
