Sin tregua, sin omisión, con la fe puesta en el triunfo.
Así fue como encaró Chivas su duelo correspondiente a la Jornada 15 del Torneo Clausura 2014 ante Monarcas Morelia, y aunque los michoacanos sorprendieron a propios y extraños con un arranque a tambor batiente por el gol del joven Jorge Alejandro Zárate apenas al salir del vestidor, el deseo y la determinación de los rojiblancos imprimieron una fuerza demoledora y futbolera a sus miles de seguidores que vibraron con las acciones de su amado Rebaño Sagrado.
Fue en la decisiva segunda mitad del cotejo cuando el Estadio Omnilife despertó en pleno, la alegría de los aficionados rojiblancos quedó de manifiesto gracias a la anotación conseguida por Carlos Gerardo Rodríguez, el lateral del Guadalajara quien en cada partido demuestra un conocimiento y entendimiento perfecto del sistema de juego del conjunto tapatío.
Tras la anotación, la afición del Guadalajara vivió el mejor momento del encuentro con el grito de ¡Chivas, Chivas! que nunca abandona la casa rojiblanca, y ni que decir de la "ola" que apareció en las tribunas y que cimbró en cada pasada un graderío ávido de corear de nueva cuenta un grito de gol del Rebaño Sagrado.
Todo estaba puesto, en el terreno de juego la postura de ir por los tres puntos de Ricardo Lavolpe al hacer ingresar a elementos como Giovani Hernández, Carlos Cisneros y Ángel Zaldivar contrastó con la decisión irrevocable de su contraparte, Ángel David Comizzo de firmar el empate en el Estadio Omnilife lo que terminó por enfriar los ataques de la ofensiva del Rebaño.
En el punto más emocional del duelo, el Guadalajara intentó por todos los medios poder convertir el tanto del triunfo, ese que los 27,500 aficionados esperaron con ansia, pero que al no concretarse, sí reconocieron en todo momento a su equipo.
Y aunque al final todo quedó en un empate, nada pudo eclipsar la entrega de los aficionados del Rebaño a los que la emoción les brotó a flor de piel al ser testigos del nuevo diseño de juego de las Chivas que ahora declaran sed de revancha , misma que tratarán de saciar en la misma cancha de Ciudad Universitaria, casa de los Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México, partido al que el Guadalajara planea llegar bien apuntalado.
