Pasadas las seis y media de la tarde, justo antes de que el sol cayera y se ocultara tras el cerro de Mitras al poniente de la Sultana del Norte, en medio de más de un centenear de niños y jóvenes que apenas y distinguieron los colores del equipo más popular del país y se acercaron de inmediato, Chivas entrenó en las instalaciones del Colegio Irlandés de Monterrey, donde los pupilos de Efraín Flores realizaron una sesión regenerativa de entrenamiento luego de su partido ante el San José de Bolivia, acontecido el miércoles anterior.
Luego de un breve calentamiento con la totalidad del plantel, el estratega del equipo separó el trabajo a realizar en el entrenamiento, pues los elementos que disputaron el partido la noche anterior llevaron a cabo un trote ligero al rededor de la cancha que duró aproximadamente 25 minutos; posteriormente, realizaron tenis balón mientras que otros efectuaron disparos a la portería por espacio de 20 minutos.
Los jugadores que ingresaron de cambio en el partido en Oruro o que no vieron actividad en el cotejo, realizaron trabajo aparte, el cual bajo el mando de Guillermo "Platanito" Hernández consistió en un calentamiento dinámico que incluyó sesiones intensas de tenis-balón con tres elementos en cada costado.
Después efectuaron futbol en espacios reducidos supervisados por Efraín Flores, quien por espacio de 25 minutos exigió a sus elementos la excelencia en el control y conducción de la pelota bajo la intensidad que el futbol en espacios cortos provee, ejercicio con el cual culminaron la actividad correspondiente al jueves.
El Preparador Físico el equipo, el profesor Guillermo Hernández, aseguró después del entrenamiento que pese a los traslados y el desgaste físico que ha tenido el equipo en la presente semana, no influirá ni mermará en su rendimiento cuando enfrenten a Monterrey, pues además de que se les tiene preparados física y mentalmente para este tipo de trabajos.
"Generalmente en Chivas tenemos educados a nuestros jugadores para afrontar este tipo de trabajos, que su mente sea el que domine al cuerpo y no al contrario; es más fácil venir de jugar en la altura a casi cuatro mil metros como lo fue en Bolivia a una altura como la de Monterrey, que es de 300 metros SNM", explicó.
"Independiente del traslado que el equipo tuvo desde Bolivia a Monterrey, tuvimos una un viaje cómodo, se contó con lugares para que el equipo lograra descansar bien y además de que los jugadores se han enseñado a descansar, se les ha inculcado técnicas de relajación para que descansen lo mejor posible en viajes como el de este tipo".
"Este jueves se tuvo un trabajo regenerativo y creo que alimentándose bien, descansando el resto del día y con el trabajo un poco más intenso que se tiene contemplado para este viernes en el entrenamiento, no tendrá ningún problema para enfrentar el partido del sábado", culminó.
Guadalajara llevará a cabo su cierre de preparación para enfrentar a los Rayados del Monterrey el viernes 18 de abril en punto de las 12:00 horas, en las instalaciones de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Nuevo León.