Acostumbrado a los grandes sacrificios, Manuel Campos, el jugador rojiblanco que surgió de Sangre Nueva, vive de lleno su proceso dentro de la Casa Club de Verde Valle, donde le ha tocado la fortuna de comenzar a crecer en lo futbolístico al lado de los entrenadores de Fuerzas Básicas de Chivas y de equipos más exigentes en el entorno rojiblanco de Verde Valle como la Tercera y Segunda División.
Metido de lleno en lo que es su proceso de formación, Manuel Campos ha tenido la oportunidad de comenzar a trabajar en los entrenamientos de los equipos de Tercera y Segunda División: "Es muy emocionante estar entrenando con los equipos más grandes, ya he tenido la oportunidad de trabajar con Tercera División e incluso con Segunda División., pero también sé que debo ir poco a poco porque todavía me falta mucho camino por recorrer".
Manuel siente que va en aumento la exigencia conforme la categoría de los equipos es mayor, pero se siente listo para tomar el reto: "Competir contra jugadores más grandes es muy difícil, pero es bueno ir conociendo hasta que punto te van a exigir para conocer tus capacidades y hasta tus deficiencias".
No ha quitado el dedo del renglón y mientras siga escalando dentro de las Fuerzas Básicas de Chivas, no se dará por vencido, hasta ganarse un lugar entre los jugadores importantes de la cantera rojiblanca: " Esto es así de mucho esfuerzo, en cada categoría hay que dar el extra, para que cada entrenador vea tu trabajo y eso es en lo que estoy concentrado, poco a poco quiero ir subiendo los escalones de Fuerzas Básicas".
Aquel niño que llegó gracias al programa de Sangre Nueva, comienza a crecer dentro del proceso de Fuerzas Básicas de Verde Valle y con objetivos claros quiere demostrar que llegó al Club Guadalajara para quedarse.